¿Cómo cambiar tus hábitos de limpieza y respetar el medio ambiente?

No hay duda de que el término “ecológico” está de moda. Lo vemos por todos lados, en las etiquetas de envases y productos que se destacan del resto en los anaqueles de los supermercados.

Incluso las marcas de productos convencionales, también se suman poco a poco a esta nueva tendencia. En el caso de los productos de limpieza ecológicos, a menudo tienen un costo un poco más alto, y es entonces cuando surge la duda: ¿valdrá la pena usar un producto natural y que es compatible con el medio ambiente? 

En primer lugar, lo que hay que señalar es que el uso de productos ecológicos está de moda porque ofrecen principalmente cuidar nuestra salud y respetar el medio ambiente. Y es que quizás esa no sea una preocupación de todas las personas, pero cada vez más existe una nueva generación de consumidores que está tomándose en serio tanto su salud como la del planeta, dejando a un lado los productos tóxicos convencionales.

En este sentido, hay que resaltar que la mayoría de los productos de limpieza ecológicos que hoy podemos hallar en los anaqueles de los comercios, pueden ayudar en la mayor parte de la limpieza del hogar, ahorrándote dinero. Sin embargo, otras empresas pudieran estar ofreciendo la promesa de un producto ecológico y no tóxico que, cuando te acercas a leer sus ingredientes, no lo es.

Para que no caigas con productos “ecológicos” que pueden no garantizarte lo que ofrecen, es mejor que prestes atención a estos aspectos que te ayudarán no solo a escogerlos correctamente, sino también a cambiar tus hábitos de limpieza por unos más saludables. Y todo eso con la tranquilidad de que estás contribuyendo también con el medio ambiente. ¿Listo para hacerlo?

1. Certificación del producto

Si bien en todas las etiquetas de productos ecológicos hallarás palabras como “ecológico”, “biodegradable”, “natural” o “verde”, debes ser precavido y fijarte muy bien que sus ingredientes no sean tóxicos o peligrosos. Recuerda que una palabra no es garantía de nada. Es mejor que busques, por ejemplo, una certificación ecológica otorgada al producto por una institución acreditada.

Sin embargo, debes saber que las certificaciones son voluntarias, por lo tanto, aunque los fabricantes no están obligados a tenerlas, eso no significa que sus productos sean menos seguros o efectivos. De allí que lo recomendable, sea que te guíes por sus ingredientes.

2. Ingredientes

Si la próxima vez que vayas al supermercado detallas los ingredientes de algunos productos de limpieza, seguro te darás cuenta que la mayoría tienen amoníaco, cloro o lejía, para limpiar y desinfectar. Y esas son sustancias que en contacto con la piel y mucosas (nariz y ojos), te pueden causar graves problemas de salud.

Incluso en muchas etiquetas podrás leer que es peligroso el contacto directo con el contenido de estos productos. Por lo tanto, aunque puedan limpiar con eficacia, debes estar consciente de los efectos nocivos que tendrá para las personas en tu hogar y hasta para tus mascotas.

Los limpiadores ecológicos, por el contrario, usan solventes como vinagre, limón o bicarbonato de sodio y, aparte, están elaborados con aceites esenciales, fragancias naturales y agua, que no son perjudiciales para tu salud. Al mismo tiempo, estas son sustancias biodegradables que al caer en el desagüe no contaminan el agua ni tienen efectos nocivos sobre el medio ambiente.

3. Eficacia

Por lo general, los productos de limpieza ecológicos son mucho más efectivos que los productos convencionales, ya que limpian sin afectar la superficie sobre la que son aplicados. Por ejemplo, un limpiador de vidrio convencional podría dañar o afectar la transparencia o brillo del vidrio, mientras que un producto ecológico no.

Pero también los productos ecológicos ofrecen un efecto mucho más duradero. Mientras que un producto convencional, hecho con muchos químicos tóxicos, no logra ofrecer ese mismo resultado.

4. Rentabilidad

Los productos de limpieza ecológicos, aunque suelen ser un poco más caros que los convencionales, terminan siendo más rentables. Y eso se debe a que rinden más y su efecto es mucho más duradero, algo que sin duda agradecerás. Asimismo, no dañan las superficies sobre las cuales son aplicados, lo que evita el desgaste y los costos por mantenimiento o sustitución de piezas en el hogar.

Y aunque no lo creas, también te ayudan a reducir los gastos médicos que te generan los efectos nocivos de los químicos tóxicos presentes en los productos convencionales. 

5. Seguridad

Muchas veces utilizamos productos de limpieza convencionales que dejan residuos tóxicos imperceptibles en muchas de las superficies donde los aplicamos. Esto puede convertirse en un gran problema de salud dentro de tu hogar. Sin contar que estos efectos nocivos se puedan trasladar incluso hasta tus mascotas.

Sin embargo, el uso de productos ecológicos te puede dar la tranquilidad de que tienes una atmósfera segura dentro de tu hogar y que no estás exponiendo a nadie a esos elementos tóxicos.

Por otro lado, hacer el cambio a productos ecológicos te convierte en un ejemplo a seguir para los pequeños de la casa, quienes pueden aprender al mismo tiempo de la importancia de la conservación ambiental.

Como ves hasta aquí, con apenas estos aspectos para escoger un producto de limpieza ecológico, ya tienes más autoridad y seguridad para dejar atrás los tóxicos limpiadores convencionales. No olvides que es por tu salud y la de tu familia. Así que no lo pienses más y la próxima vez que vayas al supermercado busca los productos de limpieza ecológicos Teza, desarrollados con fórmulas naturales y componentes 100% biodegradables.